martes, enero 03, 2012

El Post de Siempre

Recién entro a mi casa me recibe un negrito de icopor al final del pasillo que conserva la misma sonrisa que acompañó a nuestra comparsa en la Rua de Paral•lel, el mismo que saludó a los campeones pimenteros, entre ellos el amante de la cantante, desde el balcón que da a la avenida Madrid. Hace calor y mucha humedad, igual que ayer y que los días anteriores. Parece que volviera a calentar la misma pieza de pizza en el microhondas, bebiera la misma Sprite 2 litros por 1 euro, viera las mismas seudonoticias en la televisión... ¿Cuánto tiempo ha pasado desde aquellos sábados de Resto y Panxot, los paseos "orgasmus", los picnic "love story" en la Barceloneta, las frías madrugadas de blogs y Emule a saco? ...
Me obligo a coserme los bolsillos, sigo en el mismo trabajo, me he mudado como por décima vez, he vuelto a la universidad, sigo bailando en la comparsa y de vez en cuando voy a Tarragona a "pasar el finde".
La añoranza choca con la verdad... llevo ya más de un año con intención de continuar lo iniciado y hasta ahora me he cumplido a duras penas con lo urgente; me falta lo bacano, lo chévere. El verano tiene que ser más soleado y arenoso; los viajes, tener más millas; el carnaval, sonar más tropical; y las labores, tener más recompensa.
Y la verdad choca con mi mente. Sigo sin madurar.

P.D. Este post no era lo que quería escribir y es lo que me ha salido. Por algo será.